“Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos”
Actualmente, más de un tercio de la población mundial – aproximadamente 2,4 mil millones de personas – vive en países con escasez de agua y para el año 2025 se espera que el número crezca a dos tercios. Además, la contaminación del agua va en aumento, consecuencia directa de las aguas residuales industriales y de la inadecuada eliminación de desechos humanos. Por si estas cuestiones no fueran suficientes, el cambio climático está provocando fenómenos meteorológicos extremos con más frecuencia, tales como sequías e inundaciones.
Las empresas juegan un rol clave en este sentido, debiendo gestionar de forma sostenible los recursos hídricos en la creación de sus productos y servicios, fomentando y facilitando la mejora de la gestión del agua en su cadena de valor y transformando en sostenibles aquellas de sus operaciones que generen contaminación.
Todos formamos parte de una cadena conocida como el ciclo de la vida, y la destrucción de cualquier especie genera grandes estragos en la naturaleza.